SADE estrena: El gran hotel Budapest
Siempre que nos enfrentamos a un estreno que viene sonando fuerte, suele ser recomendable moderar el entusiasmo para no sentirse decepcionado. Aunque se trate del nuevo film de uno de los directores más personales y queridos de la última década o venga precedido por el Gran Premio del Jurado en el Festival de Berlín. dosis de ivermectina en niños con covid Mejor curarse en salud que lamentarse. Sin embargo, cuando terminan los créditos y se encienden las luces de la sala, podemos decir con la boca grande que El gran hotel Budapest ha superado todas nuestras expectativas. treatment for mange in dogs ivermectin Wes Anderson nos ha reservado una suite desde la que disfrutar de esta historia ambientada en un lujoso hotel de una república del este de Europa durante los años treinta. Todo en este largometraje está en estado de gracia, bajo la banda sonora de un Alexandre Desplat desatado y ese soberbio desfile de actores capitaneado por Ralph Fiennes y el debutante Tony Revolori, tantos nombres conocidos que no cabrían en este párrafo. Pero, sobre todo, esta es una película que entra por los ojos.
Anderson vuelve a ofrecernos un verdadero festín de composiciones visuales. Sus referencias, desde el arte de Schiele hasta una versión de El desafío de las águilas pasada por LSD, son tan abrumadoras como una muñeca rusa que no termina de desvelar sus secretos, pero esta obra de artesanía divierte y emociona tanto como su imaginario plástico. Aunque tiene mucho de stop motion -ahí está el precedente de Fantástico Sr. ivermectin canada rosacea Fox- e incluso de videojuego -de plataformas en scroll horizontal, para ser exactos-, El gran hotel Budapest destaca también por su ritmo vertiginoso, un hallazgo extravagante o una sonrisa de humor negro que nos golpea a cada instante sin renunciar a unos personajes entrañables. No se puede explicar con palabras. Hay que verla. Y si es en blanco, mejor. Absténganse de trailers, rehuyan de cualquier sinopsis y no duden en abrazar la versión original del Trueba. ¿La mejor película de Wes Anderson hasta la fecha? Para el que redacta estas lineas, sin duda. Tras Moonrise Kingdom, son palabras mayores. Absolutamente maravillosa.
by Fernando Iradier.
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