Entre festivales anda el juego. Big Festival, Biarritz
Desde que empieza la primavera, hasta esos últimos días en los que apuramos el verano, antes de volver a la rutina laboral y doméstica que nos propone el otoño cada año… es época de festivales. Muchísimos. Sería imposible poder ir a todos. Y si se pudiera físicamente, sería de locos. La semana pasada estuvimos en Big Festival, en Biarritz. En la séptima edición de este evento, que se celebra ya durante una semana (será como poco el festival más largo de todo el verano) y que se vive entre la playa de Côte des Basques y los escenarios de stade Aguilera y Halle de Iraty.
En Côte des Basques se vive un ambiente de atmósfera cálida, calma, entre tablas de surf, gastronomía, cervezas, sesiones de DJ´s durante todo el día, y conciertos a partir de las 19 horas.
Ver a Rural Zombies con un refrigerio, después de un baño y descalzos en la arena fue un ejercicio recomendable. Por el entorno y por la banda. Procedentes de Zestoa, son uno de los directos más espectaculares que hemos visto últimamente. Una de las bandas emergentes de la escena pop gipuzkoana.
La verdad es que durante la semana larga que dura el festival, pasan muchos nombres ilustres por los escenarios de Biarritz. Johnny Halliday, Nina Kraviz, Apollonia, Jeff Mills…
Jeff Mills
Johnny Halliday
Nina kraviz
Pero quedamos bastante sorprendidos con George Ezra y Selah Sue, dos de los cabezas de cartel (que, sinceramente, no conocíamos). Por el ambiente, confirmando esto de que los franceses no sólo escuchan música en francés (quizás sí que sólo conducen coches franceses, pero tenían bastante más idea que nosotros sobre la belga Selah Sue y el británico George Ezra). El viernes, George Ezra, perfil del perfecto indie británico, un crío inglés de 22 años que irrumpió en el panorama festivalero hace un par de años. el chaval guapo que encima canta bien pero que pasa de grandes discográficas y se mantiene fiel a su concepto deleitó con sus melodías de aire perfectamente britindie. El público aguantó el diluvio universal que cayó en mitad de su actuación. Mucho consiguió con aquella tormenta. El sábado, Selah Sue. Una voz noventera y profunda en una propuesta sofisticada. Romanticismo puro el de la cantante belga, que eligió momentos para crear una atmósfera negra en el entorno, y que se metió a todo el público en el bolsillo con sus temas premier bien repartidos durante la sesión.
Algo que nos sorprendió fue la poca cantidad de gente del lado de Donosti y entorno que se trasladó a un festival que está a cuarenta minutos y que ofrece playa, ambiente, oferta musical, arte, gastronomía, cervezas, y buena fiesta para terminar las noches. Hasta la próxima edición, Big Festival.
by Arteuparte.
fotos: